Con un espectáculo lleno de emociones y recuerdos, Natalia Jiménez volvió a encontrarse con su público xalapeño la noche del sábado en el Nido del Halcón, como parte de su gira internacional “La Jiménez”.
Más allá de los aplausos y los éxitos musicales, la cantante española aprovechó la ocasión para rendir un homenaje especial a Veracruz, un estado que, según sus propias palabras, ha sido fundamental en su camino artístico.
"¡Qué bonito es estar en Xalapa! Veracruz me abrió las puertas cuando más lo necesitaba y me dio tanto amor. Esta tierra es parte de mi historia artística y personal”, expresó desde el escenario, conmovida por la calidez del público que la recibió con entusiasmo.
A lo largo del concierto, Natalia compartió recuerdos de su llegada a México y cómo el cariño veracruzano marcó un antes y un después en su trayectoria, especialmente al iniciar su carrera como solista tras su paso por La Quinta Estación.
El público respondió con energía y nostalgia, coreando temas como “Creo en mí”, “Quédate con ella”, “Algo más” y “El sol no regresa”.
La noche estuvo marcada por momentos cercanos y espontáneos: desde colocarse unos pendientes que una niña le regaló desde la primera fila, hasta sonreír al recibir un muñeco del Dr. Simi vestido como ella. Gestos sencillos que reflejaron la intimidad y calidez del encuentro.
Con una cuidada producción, mariachi en vivo, visuales envolventes y varios cambios de vestuario, Natalia transformó el escenario en una celebración de sus 20 años de carrera. Pero sobre todo, en una muestra sincera de agradecimiento a un lugar que considera parte de su historia.
El Nido del Halcón lució lleno y vibrante, en una noche que no solo reafirmó el éxito de su gira, sino también el lugar especial que Veracruz ocupa en el corazón de Natalia Jiménez.
Una velada emotiva, llena de música y gratitud, que dejó claro que el vínculo entre la artista y su público veracruzano sigue más fuerte que nunca.
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