La historia de doña Mari ha conmovido a México, pues, desde el 2021, esta mujer de la tercera edad vivió en la Central de Autobuses de Puebla, con la esperanza de reencontrarse con sus hijos tras ser desalojada de su vivienda en Tehuacán.
Día tras día, se mantenía firme su esperanza de que uno de ellos regresaría por ella. Se negó a ingresar a un albergue por el miedo de que regresaran y no la encontraran.
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El pasado 24 de julio, doña Mari falleció en la terminal. Su fallecimiento fue reportado por usuarios y personal de la central.
Sin embargo, cinco días después, una mujer que se identificó como su hija, Marina, se presentó para reclamar sus restos. Aunque doña Mari no logró ver a sus hijos en vida, sus restos regresaron con su familia.
¿Dónde estaban los hijos de doña Mari?
Durante más de tres años, nadie supo con certeza dónde estaban los hijos de doña Mari ni por qué nunca acudieron a buscarla, a pesar de que su presencia en la Central de Autobuses de Puebla era conocida por usuarios y trabajadores.
De acuerdo con las personas que tuvieron contacto con ella, esta hablaba con esperanza de que ellos algún día volverían.
Fue hasta cinco días después de su fallecimiento, el pasado 24 de julio, que una mujer que se identificó como su hija, Marina, se presentó para reclamar sus restos. Aunque no se han revelado detalles sobre su paradero o los motivos de la ausencia, este reencuentro póstumo confirmó que su familia existía, pero llegó tarde.
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